El Manchester City consiguió una holagada victoria por 4-0 ante Fluminense para coronarse como el flamante campeón del Mundial de Clubes. Con esta victoria, los ciudadanos pudieron alzar su primer trofeo en este certamen.
De esta manera, el City cierra un ciclo histórico en la historia del club luego de haber obtenido la Champions League, en el pasado mes de junio, y la Supercopa de Europa, en agosto.
Los dirigidos por el español Josep Guardiola no pasaron ningún contratiempo ante los brasileños, y sin el noruego Erling Haaland o el belga Kevin De Bruyne pasaron por encima del rival con el argentino Julián Álvarez como figura al marcar un doblete.
El albiceleste abrió el marcador a los 40 segundos. Aké disparó desde lejos contra el poste, y el delantero cazó entonces el rebote para enviar la pelota a la red con el pecho. Instintivo, con olfato. Aún no se había alcanzado el primer minuto y la ausencia de Haaland pasó a un segundo plano.
La ventaja de los de Manchester llegó gracias a un autogol de Nino, que desvió la pelota para descolocar a su guardameta tras un centro del inglés Phil Foden. El mismo mediocampista británico fue el encargado de colocar la tercera, mientras que Álvarez sentenció el resultado con el cuarto tanto.
De esta manera, Pep ha ganado la Copa del Mundo de Clubes con cada equipo que ha dirigido, siendo esta la cuarta en su carrera. Previamente lo había hecho con el FC Barcelona de la mano de Lionel Messi.
