La presión que el delantero Gonzalo Mastriani había pedido a su hinchada sobre Emelec empezaba a mostrarse. La primera muestra se evidenció cuando Pedro Ortiz y Adrián Bone, goleros eléctricos, realizaron el calentamiento en medio de pifias. En el caso de los toreros, el estadio explotó en cánticos y ovación cuando saltaron a la cancha.
Una de las principales novedades en el ‘ídolo’ era el regreso de su capitán Damián Díaz luego de una lesión, éste ingresó para jugar en el segundo tiempo. Por su parte, Byron Castillo fue titular y recibió muestras de afecto de parte de la hinchada. En días anteriores al partido, el futbolista estuvo en el ojo del huracán debido a las denuncias de Chile sobre su nacionalidad.
El partido arrancó con fricción de parte ambos equipos. El contacto, los roces y las faltas fueron un patrón en ambos cuadros dentro del primer tiempo.
Las infracciones llevaron a que, inclusive el árbitro central, Guillermo Guerrero, deba acudir al VAR. En el minuto 33, tras una agresión de Sebastián Rodríguez sobre Byron Castillo, al referí se le acosejó revisar una posible tarjeta roja. Pese a que la entrada del capitán eléctrico fue temeraria y directa sobre su oponente, no se decidió modificar la tarjeta amarilla.
La jugada más clara de la etapa inicial fue para Emelec. Después de que ambos cuadros pudieron contener los embates rivales en sus defensas, el ‘Bombillo’ no supo aprovechar un error de Javier Burrai.
Tras un centro desde el costado derecho, el arquero argentino no pudo asegurar la pelota en sus manos y dio un rebote. El arco había quedado vacío y Alejandro Cabeza podía definir, sin embargo, envió el balón por un costado del palo en medio de los suspiros de la grada local.
En el segundo tiempo, azules y amarillos mostraron el mismo comportamiento que en los primeros 45 minutos. La diferencia fue que el fútbol se volvió más vistoso y el juego cuerpo a cuerpo disminuyó.
El cuadro millonario mostró un ritmo de juego más vertigionoso por medio de pases y enlaces entre el mediocampo y la delantera. Barcelona tuvo su más clara oportunidad en un contraataque desperdiciado.
Al 54, la defensa torera y su guardameta pudieron contener tres ataques seguidos. En el 60′ el equipo azul pudo mostrar sus dotes en la zaga cuando lograron frenar la carrera de Erick Castillo hacia el arco.
Las acciones bruscas se volvieron a reactivar en el minuto 78, cuando Castillo impactó con el puño a Joao Rojas en una disputa por el balón. El futbolista agredido presentó un corte y el defensor fue amonestado.
En los minutos finales del encuentro, Emelec pudo doblegar a los locales. Después de un centro y una atajada prolífica de Burrai, en el rebote apareció Alexis Zapata. El colombiano le pegó de primera y aunque un defensor y el portero entraron en la trayectoría, la fuerza que llevaba el esférico los venció e ingresó en el arco.
Barcelona buscó salir y se lanzó al ataque para encontrar el empate. Michael Carcelén recibió una pelota parada y le pegó de volea. La bola se coló por el poste derecho del arquero.
Con el resultado, El Ídolo mantiene la punta con 26 puntos y se ubica a tres de su inmediato perseguidor. Emelec, de igual forma, sigue en la tercera casilla con 22 unidades. La lucha por llegar a la final de la LigaPro se encendió y todo se definirá en las tres últimas fechas.
