El presidente de la República, Guillermo Lasso, manifestó este miércoles que el Gobierno central analiza la eliminación de la tabla de consumo de drogas.
Durante una entrevista con TC Televisión y retransmitida por la Secretaría General de Comunicación de la Presidencia de la República (Segcom), el primer mandatario indicó que la tabla de consumo es revisada por el Ministerio de Gobierno para eliminarla o cambiar los números.
Con esta tabla, creada en el año 2013, se establecen gramajes máximos que puede portar una persona que consume sustancias estupefacientes sin que se la considere narcotraficante. El establecimiento de esta norma ha sido cuestionado por diferentes organizaciones sociales en el país.
Lasso dijo que buscará crear centros de rehabilitación. “La tabla facilita el microtráfico”, refirió ayer el presidente en la entrevista.
El pasado martes, la ministra de Gobierno, Alexandra Vela, adelantó que, en unos quince días, el Gobierno enviará a la Asamblea Nacional un proyecto de ley para eliminar la tabla de consumo de drogas.
La funcionaria, en una entrevista con radio Sucesos, indicó que Ecuador ha sido un país de tránsito de drogas durante mucho tiempo, y que estas sustancias se han ido quedando en la sociedad, por lo que se han incrementado el consumo y el microtráfico.
“Este es un fenómeno que tiene que enfrentarse desde diferentes ópticas, no solo desde la represión o sanción, sino de una forma preventiva, involucrando a la comunidad, a los gobiernos locales, las áreas de salud, porque es donde se evidencia si niños y jóvenes están consumiendo drogas”, sostuvo Vela.
Ante este anuncio, varios representantes de organizaciones sociales, religiosas y profesionales médicos se mostraron a favor de la derogación de la tabla de consumo de drogas. La semana pasada, varias de estas agrupaciones desarrollaron una marcha en el centro de Guayaquil para pedir la eliminación de dicha tabla.
Julieta Sagnay, médico psiquiatra especializada en tratamiento de adicciones, fue una de las participantes de ese evento. Ella indicó que esta tabla ha servido para encarcelar a enfermos adictos de drogas, y que decenas de jóvenes se han volcado a las calles a delinquir para conseguir estas sustancias.
“La tabla sirvió para encarcelar a los ingenuos adictos que portaban más de lo debido. La tabla dice 0,1 gramo, un adicto de hache consume 3 gramos. Y, ¿por qué necesita consumir tres gramos? Porque cada dos horas ellos necesitan paliar el síndrome de abstinencia, porque no son atendidos por el Ministerio de Salud, no son atendidos en los hospitales, solo el área psicológica, sin atender la parte médica”, refirió la especialista.
Agregó que en los últimos años ha sido nula la atención de los gobiernos para la rehabilitación integral y reinserción a la sociedad de personas enfermas por la adicción a drogas.
“Esto va de la mano con que el sistema judicial sea asesorado por una secretaría, ministerio, instituto de adicciones, por un equipo técnico para hacer un diferencial. La tabla no puede ser un instrumento de diagnóstico para diferenciar entre una enfermedad y el narcotráfico. Un equipo técnico sí lo puede hacer. Así como hay cortes de tránsito, de la mujer, debe haber cortes especializadas en adicciones”, expresó Sagnay.
Luis Gerardo Cabrera, arzobispo de Guayaquil, consideró que aparte de la eliminación de la tabla, se debe trabajar en la prevención de que jóvenes se conviertan en adictos a las drogas. “Ahí es donde se debe invertir tiempo, recursos, hay que buscar alternativas para salvar a los jóvenes”, sostuvo.
La asambleísta por el PSC Geraldine Weber se mostró a favor de la derogación de la tabla de consumo.
“Es momento de unir esfuerzos para combatir de forma eficiente el narcotráfico e implementar verdaderas políticas en prevención y rehabilitación de drogas”, refirió Weber en su cuenta de Twitter.
