Los nuevos recursos serán para apoyar la lucha contra la desnutrición crónica infantil en Ecuador, donde el 30 % de niños y niñas menores de tres años se encuentra en esta situación.
El Banco Mundial explicó que la partida se destinará a la estrategia nacional “Ecuador crece sin desnutrición”, que tiene como objetivo reducir la desnutrición de las mujeres embarazadas y de los niños menores de 24 meses a través de la provisión de paquetes de servicios y beneficios integrales.
Estos recursos son parte del financiamiento que el organismo aprobó en abril de 2019 para financiar los sistemas de protección social a cargo del Ministerio de Inclusión Económica y Social (MIES).
“Ecuador crece sin desnutrición es una intervención clave que el Gobierno de Ecuador implementa para proteger a los más vulnerables durante la recuperación del covid-19 y para alcanzar los objetivos de desarrollo sostenible 2030″, señaló Marianne Fay, directora del Banco Mundial para Bolivia, Chile, Ecuador y Perú.
Este segundo financiamiento está dirigido a implementar acciones en 728 parroquias del país y apoyará la consolidación de una nueva iniciativa institucional, llamada Modelo de Actualización Permanente (MAP), que permitirá dinamizar e integrar el registro social a otras grandes bases de datos administrativas nacionales.
Simón Cueva, ministro de Economía y Finanzas, valoró la entrega de estos recursos para atacar la lucha contra la desnutrición crónica infantil, que calificó como “uno de los problemas estructurales más apremiantes del país”.