
El estallido de una camioneta afuera de un edificio en el norte de Guayaquil, calificado como atentado terrorista, ha dejado una persona muerta, 28 heridas (dos de gravedad) y graves daños materiales.
Este jueves 16 de octubre, agentes del Buró Federal de Investigaciones (FBI) de Estados Unidos inspeccionaron la zona del ataque, sumándose a las labores de investigación locales.
El Ministerio del Interior informó que “cualquier pronunciamiento respecto al tema se realizará oportunamente”.
No es la primera colaboración entre Ecuador y el FBI: en 2018, ante un atentado al cuartel policial de San Lorenzo, el gobierno solicitó apoyo internacional para determinar el tipo de explosivos empleados.
⚠️ Un hecho que revela la gravedad del momento y la necesidad de esclarecer responsabilidades.